Este anime retro-futurista está basado en el manga original de Osamu Tezuka -Dios del manga nipón- , que a su vez se basó vagamente en el film Metropolis (1927) de Fritz Lang. La película combina la más antigua animación 2D con fondos en 3D muy logrados. Toda la arquitectura de la ciudad es excelente y me recordó un poco a New York y sus torres, de hecho la banda de sonido es puro jazz y swing al mejor estilo Frank Sinatra.
La historia reúne los tópicos más clásicos de la ciencia ficción, vemos una sociedad del futuro, una inmensa metrópoli dividida en estratos sociales muy marcados -la clase baja vive en el subsuelo de la ciudad-, los humanos conviven con los robots y aquellos robots que se apartan de sus tareas son bajados a tiros por unos vigilantes armados, los Marduks.
En medio del caos social y político, la intriga de proyectos militares secretos -el Zigurat- y una inminente revolución, está Tima, una niña creada artificialmente que, sin saberlo, forma parte de un oscuro plan para... dominar el mundo? Todo se desarrolla gradualmente hasta ese inevitable final apocalíptico que tanto le gusta a los japoneses (ejem y a nosotros también!)
Lo que más me chocó fue el diseño de los personajes que están muy cerca de la caricatura infantil, cuando la película es claramente para adultos. Metropolis entretiene y para quienes gusten de la buena ciencia ficción, no tiene desperdicio
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